La Beata María Victoria de Fornari Strata nació en Génova, Italia, en 1562. Fue una mujer profundamente piadosa que, tras la muerte de su esposo, decidió dedicar su vida al servicio de Dios y la caridad. Aunque inicialmente su vida estuvo marcada por el matrimonio y la maternidad, tras quedar viuda, sintió un fuerte llamado a una vida religiosa.