El 2 de julio llega a la Villa de León la imagen sagrada de la Madre Santísima de la Luz. En un fue colocada por los jesuitas, en un primer lugar, en la llamada “Compañía Vieja”. Este edificio fue demolido y actualmente ocupa su lugar el Templo del Inmaculado Corazón de María.
El 23 de mayo de 1849 la Madre de la Luz fue proclamada Patrona de la ciudad de León. Su Santidad Pio IX erigió en 1864 el obispado de León y nombró a Don Sollano y Dávalos primer obispo de esta sede, el cual se distinguió por sus dotes de celoso pastor y muy devoto de la Madre de la Luz. Él mismo pidió a la Santa Sede el Patronato de la Madre Santísima de la Luz para su naciente Diócesis. S. S. Pío IX lo concedió el 19 de septiembre de 1872.
El 8 de octubre de 1902 fue solemnemente coronada la Celestial Señora por el obispo Don Leopoldo Ruiz y Flores, gracias a la concesión hecha por Su Santidad León XIII, el 23 de marzo de 1901.
La Sagrada Congregación para los Sacramentos y el Culto Divino concedió el 8 de junio de 1972, para toda la Diócesis, que la Fiesta de la Visitación se siguiera celebrando el 2 de Julio con carácter de Solemnidad. Su Santidad Benedicto XVI ha elevado la sede episcopal de León al rango de Arquidiócesis, nombrando a Mons. José Guadalupe Martín Rábago como Arzobispo. Sin duda, una muestra más de la cercanía y afecto de la Virgen por el pueblo leonés y por el Bajío entero.