San Ciro (Ciriaco) y Julita

Cuando los edictos de Diocleciano contra los cristianos se aplicaban con la máxima severidad en Licaonia, una viuda llamada Julita, que vivía en Iconio, juzgó prudente retirarse de un distrito donde ocupaba una posición prominente y buscar un refugio seguro bajo un régimen más clemente.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *